La guerra de la sal en el mundo de la nutrición

La guerra de la sal sucedió en la Italia de 1540 y enfrento a la ciudad Perugia contra los Estados Papales, el tema era que los perusinos querían evitar tener que pagar impuestos por la sal, y el resultado cualquiera se lo puede imagina: ¡con la iglesia hemos topado!. Fruto ello se extendió la leyenda de que los perusinos no ponían sal en el pan.

¿Pero a qué viene todo esto?, pues a la guerra de la sal en el mundo de la nutrición, donde unos defienden la idea de que la sal es mala, mientras otros opinan todo lo contrario, a favor y encontrar de ambas teorías no paran de surgir toda clase de estudios, y de hecho ya con anterioridad hemos abordado el tema en los artículos Comer menos sal no evita problemas cardiacos y los peligros de una dieta rica en sal y baja en potasio.

Ahora un nuevo estudio a que consumir mucha sal es tan malo como comer muy poca sal, ¿no es para volverse locos?. Los médicos llevan años advirtiendo que un consumo de sal excesivo pone en riesgo nuestra salud, aumentando las probabilidades de sufrir tensión alta y problemas del corazón, y sin embargo el mundo de la nutrición aún sigue debatiendo si esto es cierto o no.

Se sabe que comer menos sal reduce nuestra presión sanguínea, pero está por ver si esto es aplicable a todo el mundo a la hora de mejorar la salud cardiaca, ya que ahora unos investigadores canadienses han descubierto que las personas que hacen un consumo moderado de sal son las que realmente tienen menos riesgos de sufrir un ataque al corazón u otro tipo de problemas cardiovasculares.

Los investigadores apoyan la idea de obligar a reducir el contenido de sodio de los alimentos precocinados y envasados, pero en ningún caso recomiendan dejar de consumir sal, más bien proponen un consumo moderado, ni mucho ni poco. ¿Pero eso cuánto es?, pues al parecer entre 7 y 8 gramos de sodio al día es mucho, y menos de 3 gramos de sodio es muy poco, lo que nos deja que entre 3 y 6 gramos de sodio al día sería la medida de un consumo moderado.

Esto es interesante porque la Organización Mundial de la Salud recomienda un consumo diario inferior a 2 gramos de sodio, y algunos organismos públicos recomiendan un consumo diario de sodio de entre 2 y 3 gramos para personas sin problemas del corazón y con una tensión normal. Esto equivale a unos 5 gramos de sal al diarios, o lo que es lo mismo, una cucharita de sal.

Sus conclusiones se basan en un estudio realizado con la colaboración de 30.000 personas, de las que se analizaron muestras de orina para controlar los niveles de sodio y potasio.

Pues de momento estas son las últimas novedades en la guerra de la sal en el mundo de la nutrición, es probable que dentro de pocos meses aparezcan nuevas investigaciones que digan lo contrario, buenas noches  y buena suerte!.