¡La obesidad infantil se multiplica!

Puede sonar un poco sensacionalista, o al menos a mi así me lo ha parecido, pero por lo visto desde 1982, cuando la tasa de obesidad infantil en España era del 5%, hemos pasado a un 20% o más en treinta años, lo que supone multiplicar por cuatro las cifras de entonces.

Digo que es sensacionalista porque está claro que la dieta de hace unas décadas poco o nada tenía que ver con la actual, en aquella España no había ni tantos restaurantes de comida rápida ni tantos centros comerciales ni supermercados. Era otra España, y me parece que ya sólo falta comparar las cifras de la post-guerra, cuando seguro que ni existía la obesidad infantil en España, para decir que ahora estamos más gordos.

Esta comparación ha salido a colación por unas declaraciones de Julio Ardura, presidente del 60 Congreso Nacional de la Asociación Española de Pediatría que se está celebrando estos días en Valladolid, y donde participan cerca de 1.600 profesionales.

Personalmente creo que no hay que ser tan dramático, ni tildar la situación actual de “verdadera crisis mundial de salud pública”, como se ha hecho. Sin duda es un tema importante, y que hay que abordar sin demora para prevenirlo y paliarlo, ya que se sabe que esta obesidad a edades tempranas puede dar lugar a diabetes de tipo 2, cardiopatías, y problemas de tensión arterial.

Al parecer ahora se considera insuficientes las dos o tres horas de ejercicio que realizan los niños en la escuela, en mi época era así y acabamos de decir que el porcentaje de obesos era del 5%, por tanto ¿qué tan buena solución sería incrementar las horas de ejercicio en el colegio?.

Me parece más lógico que las soluciones se centren en la alimentación, donde sin duda hoy en día muchos niños abusan, con la permisividad de sus padres, de los productos hipercalóricos como la bollería industrial.

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