Comer pescado para evitar la osteoporosis

Ya desde pequeños nuestras madres siempre nos insisten en lo bueno que es comer pescado. A esas edades uno no se lo acaba de creer y normalmente, más que nada por capricho, muchos niños dicen que no les gusta el pescado.

Cuando somos niños no tenemos tantos achaques, por tanto se puede pasar por alto que un niño no coma suficiente pescado, sin embargo al hacernos mayores conviene dejar a un lado los caprichos y los remilgos y velar por nuestra salud, a fin de cuentas el pescado realmente está muy bueno y se puede preparar las formas más diversas.

Como refleja un estudio reciente sobre osteoporosis, las personas mayores que consumen bastante pescado tienen una mejor densidad osea que los mayores que “pasan” de comer pescado o que no lo comen con mucha frecuencia.

Cierto es que el e estudio no prueba que tales hábitos fortalezcan los huesos, pero los investigadores creen que la combinación de diferentes aceites de pescado protegen los huesos de la pérdida de masa con el paso del tiempo.

Concretamente, consideran que los ácidos grasos omega 3 del pescado ayudan a prevenir la pérdida de masa ósea, aunque reconocen que la prevención de la pérdida de hueso no es tan simple como elevar los niveles de grasas omega 3 en la dieta de las personas mayores.

Para llegar a estas conclusiones se analizaron las encuestas recogidas en las décadas de 1980 y 1990, donde se recogían los hábitos alimenticios de más de 600 ancianos que vivían en Framingham, Massachusetts. Las mediciones de la densidad ósea en la cadera fueron tomadas con 4 años de diferencia.

Lo que observaron fue que las mujeres que consumían tres o más porciones semanales de pescado azul, como el salmón o la caballa, tenían una menor pérdida ósea cuatro años más tarde, en comparación con las mujeres que comieron menos pescado. Por su parte, los hombres que comían pescado azul o atún por lo menos tres veces por semana también tuvieron menos pérdida ósea que los demás hombres.

Si bien la pérdida de hueso forma parte del envejecimiento, es evidente que los huesos menos densos tienen un riesgo mayor de fractura. En cualquier caso, el estudio no pudo demostrar que el pescado fue la causa de las diferencias en la pérdida de hueso, sino simplemente que existe una conexión entre ambas.

Publicado en American Journal of Clinical Nutrition