Presionando a las células de grasa

Desde las dietas de moda a los programas de ejercicio, la gente continúa batallando contra la gordura. Quizás dentro de poco, y gracias a unas investigaciones recientes de la Universidad de Tel Aviv (una de las más reputadas del mundo en I+D), se desarrolle un nuevo método para quemar grasa que consiste en aplicar presión a los adipocitos, también conocidos como lipocitos, que son las células que forman el tejido adiposo.

El entender cómo controlar la cantidad de grasa producida por las células de grasa, se podría decir que es el santo grial para los investigadores que centran sus trabajos en la pérdida de peso. La teoría que barajan estos israelitas especializados en ingeniería biomédica es que la carga mecánica influye sobre las células de grasa. Dicho de otra manera, una determinada cantidad de fuerza o deformación aplicada en un área particular ocupada células grasas puede provocar que estas se desintegren, lo cual tendría una aplicación directa en los programas de pérdida de peso, así como en los tratamientos de úlceras por presión y el control de la diabetes crónica.

Actualmente en el mercado existen productos como los cinturones quema grasas que actúan por medio de vibraciones, según los investigadores estos productos están en el buen camino, sin embargo sus resultados hoy por hoy están en entre dicho ya que aún queda por determinar qué cargas mecánicas y con qué frecuencia son las adecuadas para obtener óptimos resultados.

La aplicación de cargas mecánicas en los tejidos puede afectar a muchas células diferentes dentro de nuestros cuerpos. Por ejemplo, la gravedad cero afecta a la densidad ósea de los astronautas. Cuando los astronautas regresan a casa después de un vuelo espacial prolongado, a menudo se ven confinados durante un corto espacio de tiempo a una silla de ruedas. Las estructuras de los huesos y los músculos, los cuales son determinados por las células que producen estas estructuras, se debilitan debido a la falta de cargas mecánicas. Esto ocurre porque las células son privadas de una estimulación normal como puede ser caminar.

La idea de los investigadores es que al igual que las células de hueso o músculo, las células de grasa también se ven afectadas por las cargas mecánicas. Así para su investigación emplean modelos informáticos similares a los que se emplean en los test de resistencia de puentes o máquinas para determinar la resistencia de la diferentes células y así descartar que un determinado tratamiento para el sobrepeso pudiera afectar a las células de los músculos o de los huesos.

En cualquier caso es una buena noticia dado que las tasas de personas con diabetes y sobrepeso no cesan de aumentar.